• El concejal de Ciudadanos ha detallado otras mejoras de esta adaptación de la norma pendiente desde 2018: “Se incluyen bonificaciones para familias numerosas y permite dejar por escrito algo que ahora ya está en vigor, pero de forma tácita, como es que en ningún caso se procederá a la suspensión del suministro a aquellas personas en situación de emergencia social acreditada”.

 

El concejal de Ciudadanos y presidente de la Sociedad Municipal Aguas de Burgos, Miguel Balbás, ha detallado esta mañana las mejoras más reseñables introducidas en la nueva ordenanza de Aguas. Un cambio que, según ha indicado, “no deja de ser una adaptación obligada de nuestra normativa local al marco jurídico establecido en la ley 9/2017 de Contratos del Sector Público, que determina una nueva naturaleza de las contraprestaciones económicas por los servicios públicos en régimen de derecho privado”.

Este ajuste afectaba a la Sociedad Municipal Aguas de Burgos ha recorrido un largo camino hasta la fecha, pues la ley citada entra en vigor en 2018 y el anterior equipo de Gobierno pese a que esboza un borrador inicial “lo deja durmiendo en el sueño de los justos”, lo que paraliza el cambio, “hecho que se suma al problema de las facturas pendientes de cobro, que es lo que con el nuevo equipo de Gobierno se priorizó”, ha explicado el edil de la formación naranja.

Una vez solventado este asunto “retomamos el cambio de ordenanza y disponemos ya del documento definitivo que, calculo, entrará en vigor en el plazo de un mes”, ha aclarado Balbás, para proceder a detallar las cuatro grandes novedades que incluye.

En primer lugar, ha destacado “la bonificación a la que van a acceder las familias numerosas que se acogerán a la tarifa del bloque 1, el más barato, con independencia del consumo que hagan, dato que hasta ahora era determinante para obtener descuento”. Además, esta ventaja se mantendrá vigente hasta el límite máximo de la fecha de validez del título de Familia Numerosa en el momento de la solicitud, sin necesidad de presentar la solicitud anualmente como obligaba la antigua ordenanza.

Especial hincapié ha hecho el presidente de Aguas de Burgos en “la inclusión de la posibilidad de fraccionamiento y aplazamiento del pago, que podrá ser de dos tipos: para personas físicas con un plazo máximo de demora de 20 meses de aquellas deudas y con importe mínimo de 300 euros, sin necesidad de garantía, y para personas jurídicas, con un plazo máximo de 30 meses”. En este caso sí que se exigirá garantía en aquellos importes a fraccionar superiores a 20.000 euros.

La tercera mejora sustancial que ha explicado Balbás es la “introducción de una vía de apremio, que no existía”, así como los posibles mecanismos de embargos que pueden utilizarse si después de esta vía sigue sin saldarse la deuda.

Y como de especial relevancia ha indicado también el concejal del partido liberal que “en esta ordenanza queda escrito, y no solo tácitamente como hasta ahora, que en ningún caso se procederá a la suspensión del suministro para uso doméstico a aquellas personas que estén en situación de emergencia social acreditada”.

Además, el edil ha dejado claro que esta nueva ordenanza no influye para nada en el precio que los ciudadanos pagan por el agua: “Los precios se mantienen, se trata solo de un formalismo legislativo que nos ha permitido incluir las citadas mejoras”.