· La formación naranja propone la creación de una comisión ‘ad hoc’ y de rebajas fiscales en el IBI, el IAE y otras tasas municipales

 

El Grupo Municipal de Ciudadanos en el Ayuntamiento de Burgos ha presentado una batería de propuestas dirigidas a paliar los efectos económicos y sociales de la crisis del coronavirus en la capital. La formación naranja, desde el respeto a las decisiones y recomendaciones de los Gobiernos central y autonómico, ha mostrado su preocupación por las secuelas que la epidemia puede dejar en el tejido social y productivo de la ciudad.

Para hacerle frente a esta situación, ha propuesto la creación de una comisión de seguimiento formada por todos los grupos municipales, para dar cuenta con regularidad de las acciones que se toman a este respecto y que esté abierto a la participación de todos, tal y como ya se ha hecho en el Ayuntamiento de Madrid. Dada la magnitud de los acontecimientos en curso y de sus posibles consecuencias, el partido liberal aconseja la creación de una concejalía o la delegación de competencias ad hoc que permita centralizar y coordinar todos los esfuerzos que se realicen y que estén encaminados a gestionar aspectos sanitarios y económicos.

El portavoz de Cs en Burgos, Vicente Marañón, ha manifestado su profunda inquietud por el impacto de esta recesión en el sector de los servicios, en el comercio y la hostelería en particular. Por ello, defiende “una reducción del IBI del 25%, siempre que mantengan sus condiciones laborales y sus empleados durante el ejercicio 2020 y una reducción del IAE del 25% para los sujetos obligados a pagarlos que tributen por cuota municipal por Ocio y Restauración, Agencias de Viaje, Comercial y Grandes Superficies”.

El concejal ha planteado también “la suspensión de la tasa por la utilización privativa y el aprovechamiento especial del dominio público municipal durante el tiempo que dure el estado de alarma”. En este sentido ha propuesto devolver el importe equivalente al tiempo en el que las terrazas no puedan prestar servicio, tomando como fecha de inicio del 16 de marzo de 2020 y prolongándose el espacio temporal que dure el estado de alarma.

En cuanto a otros impuestos, Marañón ha recomendado aplazar del periodo de pago voluntario del impuesto de Vehículos de Tracción Mecánica (IVTM). La fecha inicial, del 1 de abril al 1 de junio de 2020, deberá retrasarse del 1 de mayo al 30 de junio.

Desde el partido liberal también se ha manifestado su apoyo a medidas relacionadas con la movilidad, como la supresión de la tasa de la ORA de manera indefinida mientras dure el confinamiento y los autobuses presten servicios mínimos, ahora que los trabajadores se ven forzados a utilizar su vehículo particular, o las vinculadas a favorecer el uso del servicio de taxi para desplazamientos hasta o desde el HUBU o el Divino Vallés. Al respecto ha instado también a garantizar medidas de desinfección y seguridad frente al virus para los taxistas o el mantenimiento de los servicios mínimos del transporte público urbano, tal como recoge las recomendaciones de la Junta.

Respecto a la limpieza de Burgos, desde Cs se plantea “reforzar con medios materiales y humanos la limpieza y desinfección de estaciones de autobuses, de ferrocarril, de marquesinas y de los centros de salud y hospitales, así como de otros edificios públicos de uso común”.

El portavoz del Grupo Municipal ha propuesto que siempre que la climatología lo permita se reduzcan los barridos manuales y se prioricen los baldeos y la limpieza de zonas donde se registra mayor actividad, tales como los ya mencionados y farmacias, tiendas de alimentación y mercados de abastos, paradas y estaciones, estancos, gasolineras y quioscos. Ciudadanos plantea también la suspensión del servicio gratuito de recogida a domicilio de muebles y enseres, así como de los puntos limpios.

En términos generales la formación ha trasladado al equipo de Gobierno “la necesidad de potenciar la atención telefónica y online de las gestiones que deban realizarse con el Ayuntamiento, así como la ampliación de los servicios prestados electrónicamente”.

Marañón ha afirmado que “la emergencia sanitaria que vive España y que ha provocado el estado de alarma actualmente vigente exige que el Ayuntamiento de Burgos adopte las medidas necesarias a su alcance que posibiliten la mejor y más rápida gestión de esta crisis, así como la superación de sus potenciales consecuencias económicas”.