• El vicealcalde ha subrayado en el Debate del Estado de la Ciudad que esta urbe fue grande cuando se abrió y tuvo ambición: “Esta actitud es estratégica y el Ayuntamiento debe liderar los cambios necesarios”

 

  • Ha repasado los proyectos clave “en marcha gracias a la responsabilidad de Ciudadanos, que ha permitido emerger de la pandemia con un gobierno más fuerte”

 

El vicealcalde y portavoz del Grupo Municipal de Ciudadanos, Vicente Marañón, ha aprovechado el Debate del Estado de la Ciudad, celebrado hoy en el Monasterio de San Juan, para llamar a recuperar la histórica mentalidad de aquel Burgos que impulsó la Primera Vuelta al Mundo hace 500 años. Iniciaba así una intervención enfocada en subrayar la necesidad de convertir esta urbe en lo que ya fue entonces, “cuando se abrió y tuvo ambición”: “Una ciudad grande”. El también portavoz municipal ha invitado a los corporativos a “romper la tendencia proteccionista y empobrecedora de los anteriores mandatos” para garantizar un futuro a un lugar que “envejece y pierde a su población más talentosa”.

Marañón ha considerado que esa actitud a la que ha apelado es “estratégica”, para reconocer que “el Ayuntamiento debe liderar la transformación que requiere” siendo además “muy consciente de que vivimos en un mundo global en el que hay que competir para ocupar el lugar que merecemos”.

El edil de la formación naranja se ha detenido en el camino recorrido hasta llegar al momento presente, de estabilidad y esperanza, que solo ha sido posible “gracias a la responsabilidad de Ciudadanos”“Nuestro paso al frente, con valentía, ha servido para emerger de la pandemia con un gobierno fuerte. Eso, en definitiva, es liderar cuando más falta hacía”, ha añadido. Al respecto, ha repasado los hitos y proyectos clave impulsados en las áreas a cargo de los concejales liberales.

No ha faltado en este punto la referencia a Aguas, “ejemplo legendario de cómo no se debe gestionar lo público”, que, bajo el mando de Miguel Balbás ha comenzado ya una profunda transformación. Un cambio a mejor que se extenderá al conjunto de la administración local con la inminente implantación de los distintos mecanismos de modernización que supondrán el mayor salto cualitativo del Ayuntamiento en los últimos treinta años.

En materia de Comercio, liderada por Rosa Niño, Marañón ha destacado el firme apoyo a los negocios de la ciudad, con especial atención a los que han sufrido los rigores de la pandemia. Se ha detenido también en el Mercado Norte: “Sabemos que vamos tarde, pero estamos en ello, tenemos un compromiso”.

Licencias, competencia de Julio Rodríguez-Vigil, ha sido tildada por el vicealcalde como ámbito esencial para los ciudadanos, pues en su seno se desarrollan normas que velan por la seguridad de los burgaleses. “Buen ejemplo de ello es la recién anunciada nueva ordenanza de ‘chamizos’, clave para evitar incidentes. No podemos mirar hacia otro lado”.

El IMC, presidido por Rosario Pérez Pardo, ha tenido también su protagonismo en la intervención de Marañón: “Se trata del principal embajador del cambio deseado de la ciudad, nuestra carta de presentación a los que vienen y de los nuestros fuera. Y nos esforzamos por dar forma a programaciones y apuestas de altura, las mejores de nuestro entorno”.

Sobre Promueve, el que es su actual presidente ha recordado que al inicio del mandato era un caos en el que no había nada: “Por fin le estamos dotando de lo necesario para que cumpla su importante papel y pronto se verán los resultados”.

Como colofón ha señalado iniciativas como la rehabilitación del Castillo, el arreglo de la piscina del Plantío o el nuevo polideportivo de San Pedro y San Felices, como tres proyectos de especial importancia impulsados por Cs.

Vicente Marañón ha tenido también palabras para la oposición, a la que ha definido como blandengue: “El desierto propositivo que encontramos es desolador. Todo son vaguedades, no aportan nada que podamos aprovechar”.